miércoles, 24 de febrero de 2010

Huéspedes Ilustres

Desde 1783 han llegado a la población de San Casimiro de Güiripa ilustres visitantes. Unos lo han hecho por el deber y otros por cortesía. El primero en llegar es el Obispo Mariano Martí el 20 de mayo de 1783. Había en ese entonces un poco más de 500 habitantes y al año siguiente en un censo realizado entre el 10 de marzo y el 18 de junio había 94 familias para un total de 600 personas (entre estos algunos esclavos). Al ínclito Prelado se le debe la fundación de San Casimiro y el nombre de la población.

Cuando San Casimiro tenía 101 años vino al poblado el Arzobispo Ramón Ignacio Méndez, destacado prócer de la independencia y amigo personal del libertador Simón Bolívar. Fue el primer Arzobispo de Caracas luego de la independencia. Esta visita la realizó el 28 de febrero de 1834; concede en este día varias indulgencias, entre estas “80 días por rezar un Padrenuestro ante cualquiera de las tres imágenes del Santo Patrón San Casimiro, la que estaba en el Altar Mayor y las dos de la Sacristía”. En el mismo 1834 realiza una segunda visita. Llega el 31 de diciembre y pasa varios días en la población y le cantan aguinaldos y come hallacas.

Otra de las estancias que es digna de mencionar y que dejó una estela de comentarios es la del Presidente Antonio Guzmán Blanco. En 1873 llegó para inaugurar la carretera Cúa – San Casimiro y en cuya construcción, desde San Casimiro al Yagual, trabajaron don Manuel Castillo y el General Ramón Guerra como inspector y administrador de la obra. Cuenta la historia de que el Cura Dr. Manuel Felipe Rodríguez fue el encargado de realizar un arco y que en la parte superior debía llevar la inscripción siguiente: “Guzmán Blanco es la paz”. Ese día todo era algarabía en la entrada del pueblo y nadie notó que una letra se había desprendido. Al llegar Guzmán y pasar por debajo del arco, leyó: “Guzmán es la pa” y mirando a la gente manifestó: “Conque yo soy la lapa… bueno si… pero ustedes son los cachicamos”.

– Las mismas palabras cuando mandó a fusilar a Matías Salazar – le dijo el cura al General Laureano Carballo.

El 29 de octubre de 1899 se produce la visita del General José Manuel Hernández (El mocho) y es recibido con banquete, música y baile en la casa Padrinera (frente al Banco de Venezuela y al lado donde estuvo el cine). Este agasajo al mocho Hernández trajo enormes consecuencias para los pacíficos pobladores ya que fue saqueado el comercio por las tropas del gobierno.

En mayo de este año se cumple tres cuartos de un siglo de la estancia de Carlos Gardel en San Casimiro de Güiripa. El “Zorzal Criollo” llega a la Guaira el 25 de abril de 1935. Después de realizar sus presentaciones en la capital de la República se traslada a Maracay en el mes de mayo, invitado por el Presidente Gral. Juan Vicente Gómez. Allí estuvo alrededor de 3 días, contando chistes y cantándole, al hombre fuerte de Venezuela, lo mejor de su repertorio. Fue tanta la emoción que sintió Juan Vicente Gómez que se desprendió del guante para estrechar la mano de Gardel. Entre la comitiva que acompañó a Carlitos a Maracay estuvo el sancasimireño Rafael Visconti Seijas, hijo del gran amigo de Gardel, el Sr. Francisco Visconti. Juntos trabajaron en el teatro Colón de Buenos Aires. Gardel como tramoyista y Francisco Visconti como empavonador de arañas. Gardel debe haberle dicho a Gómez de que quería venir a San Casimiro, ya que el General Gómez le asignó un automóvil con chofer para que los trasladara. A San Casimiro llegó una tarde de mayo, acompañado de Rafael Visconti Seijas y del que sería después un gran narrador deportivo: Luis Plácido Pizarello. Se alojó en el Placer del Bachaco que era de Francisco Visconti. A la mañana siguiente conoció la Plaza Bolívar que estaba en construcción y se tomaron fotografías al frente del cine, pero dentro de la plaza. Según cuenta el desaparecido cronista Guillermo José Schael en su columna “Brújula” del diario El Universal, “de que Carlos Gardel le comentó a Luis Plácido de que quería comprar un terreno para hacer una finquita y que el pueblo de San Casimiro le gustaba mucho”.



Crónicas de un sancasimireño

Salvador Rodríguez


miércoles, 10 de febrero de 2010

Origen e Historia del Francisco Iznardy

A Félix Tortolero, que brilló en sus espacios.


Durante el gobierno de Juan Vicente Gómez y en el primer año de gobierno del Gral. Eleazar López Contreras existían las escuelas Municipales (escuela de varones Nº 129 y la escuela de niñas) y las particulares que ofrecían, estas últimas, las propias casas de los preceptores. En septiembre de 1936 bajo la Administración de López Contreras y en el Ministerio de Instrucción Pública los valiosos venezolanos Alberto Smith y Augusto Mijares (villacurano), se decretaron 200 escuelas graduadas para el interior del país. A San Casimiro de Güiripa se le asignó la Escuela Federal Graduada con el epónimo de Francisco Iznardy, quien fue secretario del Congreso de 1811 y redactor del Acta de la Independencia.
En los albores de 1937 (Enero) comienza sus actividades académicas la Escuela Federal Graduada Francisco Iznardy ubicada en la casa que fue de Natividad Liendo y su esposa Victoria en la calle Monagas. Actualmente vive la familia Castro Morales. El Sr. Natividad Liendo era de Valle Morin y fue encargado de la Hacienda de Café en el Socorro en la Parroquia Güiripa. De su inicial recinto es mudada a la casa donde habitó el poeta Pastor Rodríguez Manzo (al frente de la Plaza Bolívar) y anteriormente este mismo sitio fue escuela particular regentada por Obdulia Gamarra y luego de Lino Armas. En la actualidad la habita la sobrina Laurita, su esposo y sus descendientes Naomi y Santiaguito. Cuando estuvo en este espacio tuvieron que habilitar un salón en la casa de la familia Ochoa Jiménez (donde estuvo el juzgado) para que el maestro Martín Díaz impartiera sus clases magistrales.
De la morada antes citada fue trasladada a la casa que hoy habita la maestra Celina Mejías de Plaza. Estando en este local se tuvo que acondicionar una sala en la casa del Sr. Domingo Macero (donde está la frutería) hacia la calle Bolívar. Allí estudió el Sr. Domingo Pérez y la hoy maestra, María Gil Zapata. La alta matrícula y la trashumancia agotadora permitieron insinuar con claridad un aposento seguro para la nuevas generaciones de sancasimireños.
En el año de 1953 comienzan los trabajos para la construcción del Grupo Escolar Francisco Iznardy. Para dar paso al moderno edificio de dos plantas tuvieron que derribar varias casas, entre ellas, la del músico compositor, maestro de capilla y juez del distrito, Gil Fonseca. La nueva construcción costó un millón de bolívares de los de antes y su constructor fue el Sr. Dimas Contreras, compadre del Sr. Tito Escobar. El Presidente Marcos Pérez Jiménez llegó a las 10 de la mañana para inaugurar la primera casa de estudios de la población. Las niñas Mariluz García y Celina Guzmán sostenían la cinta entre sus manos para que el Presidente dejara inaugurado la institución. Mariluz con un vestido amplio de 3 piquetes color vinotinto con florecitas y Celina con una falda estampada y blusa descotada con faralá. Al finalizar el acto el Presidente se dirigió a la casa que hoy ocupa la familia Zamora (Casa Tierra Negra) para inaugurar la Escuela de Artes y Oficios.
En el Grupo Escolar Francisco Iznardy se concentraron la escuela Lucas Guillermo Castillo, creada bajo el gobierno del Dr. Aníbal Paradisi y la Escuela Nocturna. El lunes, 19 de Octubre de 1953 inicia sus actividades escolares con los maestros siguientes: Félix Fortunato Tortolero, Carmen Pimentel de Valero, Angélica de Armas, María de Noriega, Aurelio Ramón Sánchez Figueroa, Angustia de León, Rosa Albertina Rengifo, Rosa Sánchez de Cueva, Rafaela D´milita de Calderón, y Potino Calanche Brito (autor del himno de la institución). Ese 19 de Octubre la niña María Gil Zapata interpretó una hermosa canción, entre otros números, para el recibimiento de la nueva grey que llegaba con el entusiasmo y las ganas de saber de la moderna Institución. Igualmente se estrenaba como director de la bella construcción el Prof. Ambrosio Noriega Rodríguez y como secretaria la Srta. Elba Salinas. En sus puestos de bedeles estaban Asunción Requena, Lourdes Martínez, Ángel Oliveros y Víctor Terán.
Dos épocas, dos fechas para recordar: la del Prof. José Gregorio Morales, su primer director como Escuela Federal Graduada y Luis Roberto Casado como director Encargado. La otra, la del Prof. Ambrosio Noriega Rodríguez, director del Grupo Escolar Francisco Iznardy (del moderno edificio). Las fechas: Enero de 1937 y 19 de Octubre de 1953. Dos épocas, dos fechas y una sola historia: la de educar a los habitantes de San Casimiro.
Para cerrar esta bella historia traemos a dos grandes maestros fallecidos: Potino Calanche Brito y Félix Fortunato Tortolero, el primero, “Asomado al claro balcón de tu cielo” (como dice la letra del himno que escribió), recibe a Félix y le tiende la mano y le dice: “Siempre Luminoso, fraterno y cordial” (como dice el segundo verso de la primera estrofa). Los dos, allá en las alturas, velan por el Grupo Escolar Francisco Iznardy. Y aquí en la tierra, en este valle de San Casimiro de Güiripa, la Prof. Lourdes Barrios Parra y su equipo: “Forjas celoso y con profundo amor” y “Para la esperanza del niño jovial”.



Crónicas de un Sancasimireño
Salvador Rodríguez

Fotografias V Aniversario "Revista Naveran"



Historia del Concejo Municipal de San Casimiro

San Casimiro de Güiripa en sus inicios perteneció a San Sebastián de los Reyes y luego a la Purísima Concepción de Camatagua. En 1875 fue Presidente del Concejo Municipal del Departamento de San Casimiro el Sr. José María Zamora y el Subprefecto el Gral. Laureano Carballo. Más adelante, seguro, hubo otros Presidentes del Concejo Municipal. Es hasta 1899 que San Casimiro de Güiripa es elevado a Distrito, independiente y con su Jefe Civil, su Juzgado, su Concejo Municipal y su Registro Subalterno.
El Concejo Municipal del Distrito San Casimiro se instaló, por primera vez, el 19 de febrero de 1899 (este año se cumplen 111 años), y su primer Presidente fue el Sr. Reinaldo Alva, probablemente de Valle Morín. En el año 1900 es ratificado el Sr. Reinaldo Alva (comerciante), como Presidente de la Corporación y Rodulfo Requena (dueño del Santo San Casimiro y de la Trilla que fue luego de Rafael Ángel Acosta) como Vicepresidente. Los otros concejales fueron: Pedro A. García e Ignacio Carreño, como miembros princípales y los suplentes, los señores: Juan Francisco Saavedra Rodríguez y Gil Fonseca (extraordínario músico y compositor). En la tercera sesión, celebrada el 15 de marzo de 1900, se incorporó como Síndico Procurador, el Sr. Pedro Manuel Álvarez y quien a su vez era concejal del ayuntamiento.
Desde que San Casimiro comenzó a andar solito y brillar en el concierto de los pueblos de Aragua, han dirigido su destino, 64 personas, hombres y mujeres, que si lo hicieron bien o no (esta crónica no és para juzgarlos), contribuyeron, por muy pequeño que sea su aporte, con la historia política de San Casimiro.
Se podrían citar sus nombres, tomando en cuenta de quienes dirigían el país para tener una idea del tiempo en que gobernaron. En el gobierno del Gral. Cipríano Castro, estuvieron como Presidentes del Concejo Municipal, los señores: Reinaldo Alva, Rodulfo Requena, José María Zamora, Francisco Nieves, Luis Gondelles, Federico Hidalgo, José María Carreño, Ramón Dupré y Miguel Zamora Bolívar. Durante el mandato de Juan Vicente Gómez, llegaron a la presidencia del concejo, las personas siguientes: Mariano Carrera Castillo Veitía, Francisco Nieves, Antonio Valero, Pedro Manuel Álvarez Vera, Manuel Ledezma, Lucas Echezuría, Álberto Peña (padrino de Rubén Sosa), Rafael Antonio Vargas, Jesús María Hidalgo, Francisco Villasana (esposo de la maestra Leopoldina), Rafael Guerra, Ramón Emílio Guerra, Carlos Vicente D`milita, Pablo Guillermo Schwartz.
A la muerte de Gómez, gobernó el país el Gral. Eleazar López Contreras y fueron presidentes de la corporación, los señores: Carmen Julián Salinas (dueño de una alfarería), Nicolás Guevara, Ramón Marrero (según la historia, segundo dueño del negocio en la esquína de Míraflores), Ricardo Seijas, Ernesto Vargas (músico y compositor), Augusto Vilera (dueño de la farmacia “Sor Teresita”) y Rafael Antonio Vargas (músico y comerciante). Después del mandato del hombre de Queniquea, vino Isaías Medina Angarita y en San Casimiro fueron presidentes: Carlos Vicente D`milita, Pablo Guillermo Schwartz, Rafael Antonio Esaá Melgarejo, Rafael Humberto Vargas y César Augusto Nieves Gamarra.
En 1945 es derrocado Isaías Medina Angarita y asume la Presidencia de la Junta Revolucionaria de Gobierno el Sr. Rómulo Betancourt y en San Casimiro son Presidentes, los señores: Ricardo Seijas, Rafael Ascanio Jiménez, Rafael Guerra y Augusto Nieves.
En 1948 un golpe militar saca del poder al escritor Rómulo Gallegos y en la presidencia del ayuntamiento estuvo Rafael Guerra. En el ejercicio presidencial de Carlos Delgado Chalbaud, Germán Suárez Flamerich y Marcos Pérez Jiménez pasaron por la presidencia de la corporación, los señores: César Augusto Nieves, Rafael Humberto Vargas, Ramón Guerra, Pedro Requena, José Hector Curiel, Andrés Aular, Rafael Ángel Acosta, Ernesto Vargas, y Domingo Valero.
En el período democrático, gobernaron en el país: Wolfgang Larrazábal, Rómulo Betancourt, Raúl Leoni, Rafael Caldera, Carlos Andrés Pérez, Luis Herrera Campins, Jaime Lusinchi, Ramón J. Velásquez y Hugo Rafael Cháves Frías, y en San Casimiro dirigieron el Concejo Municipal, las personas siguientes: Néstor Padrón, Luis Alvis, Isabel Gondelles de Acosta, Martín Díaz, Nicolás Segovia, Rafael Parra, José Antonio Gómez, Pedro Meza, Francisco Antonio Herrera, Consuelo Mota de Villegas, Arnoldo Calderon, Ramón Herrera Jiménez, Manuel Alfredo Brandt, Doritza Nieves de Barrios, María Gil de Barrios, Aníbal García, Santiago Gómez, César Federico Álvarez, Matilde Rejón de Bolívar, Noel Rondón Campos, Alfredo Piñango, Raúl Torrealba, Luis Rodríguez, Rafael Rodríguez y Pedro Gómez.
En otra crónica escribiremos de las obras que realizaron al frente de la Presidencia del Concejo Municipal de San Casimiro.


CRÓNICAS DE UN SANCASIMIREÑO

Salvador Rodríguez

Dr. Vicente De Milita

Como el mismo nombre de esta crónica firmaba el Dr. Vicente De Milita las actas de reuniones del Concejo Municipal del Distrito San Casimiro. Antes de ser electo concejal, las autoridades del municipio San Casimiro necesitaron de sus servicios como médico. “ En la sesión ordinaria del día veinte y nueve de septiembre de mil novecientos, el presidente del Concejo Municipal del Distrito San Casimiro, Sr. Reinaldo Alva, manifestó ' que habiendo circulado en esta población la noticia de haber en Monte Oscuro, caserío de esta jurisdicción un caso de viruela, y siendo ésta enfermedad, una de las de más fatales consecuencias, se hizo necesario practicar el reconocimiento, y al efecto se constituyó en dicho caserío el facultativo doctor Vicente De Milita, acompañado del ciudadano Coronel Jefe Civil Provisional del Distrito y Luis María Carballo, Comisario Gral. de Policía de aquella localidad. Constituidos los nombrados en el bohío que habita una familia de apellido Piñero, resultó del exámen científico practicado en una mujer de la casa, ser verdad que está atacada del mal de la viruela, enfermedad contagiosa, que no solo ha hechos estragos en Venezuela, sino también en todos los paises del mundo entero. Oído el informe del facultativo, y la imperiosa necesidad de aislar la variolosa a un lugar distante de las otras casas, a fin de evitar la propagación del mal, sin pérdida se acordó como medida higiénica y del momento construir un rancho cubierto de gamelote, que sirva para degredo, en un punto bien distante, donde se trasladará inmediatamente la mujer variolosa, y las demás personas que sean atacadas de la misma enfermedad, comisionándose al comisario Gral. de Policía de Monte Oscuro, para la inmediata construcción del rancho, el cual se hizo sin pérdida de tiempo y trasladándose a ella la variolosa, siendo el costo del rancho ochenta bolivares que por no haberlos en caja en la administración de rentas, los suplió de su bolsillo…”

A los meses de haberle servido a la población, el Dr. Vicente De Milita es electo primer Vicepresidente del Concejo Municipal del Distrito San Casimiro. El 4 de Noviembre de 1900 el Concejo Municipal del Distrito San Casimiro quedó conformado por las sigientes personas y sus respectivos cargos: Reinaldo Alva, Presidente; Dr. Vicente De Milita, Primer Vicepresidente; Rodulfo Requena, Segundo Vicepresidente; Juan Francisco Saavedra Rodríguez, Síndico Procurador Municipal; y Mariano Carrera, Secretario.

El Dr. Vicente De Milita en fecha del 26 de Diciembre de 1900 perteneció a la junta encargada de “ Los festivales que han de llevarse a efectos con la mayor esplendidez para la entrada del siglo veinte” . Esta junta estuvo compuesta por el Gral. Manuel Rasquin como Jefe Civil Provisional del Distrito, el Sr. Cura Cándido María Machado, Reinaldo Alva, Rodulfo Requena, Antonio Padrón (educador), Lope Medina (administrador), Ramón Emilio Guerra y Mariano Carrera.

El 19 de Enero de 1901 es nombrado para conformar la junta de sanidad junto al Dr. José María Zamora, el Cura Cándido María Machado, Mariano Carrera y el Presidente del Concejo Sr. Reinaldo Alva. También el Dr. Vicente De Milita fue miembro de la comisión de exámen, revisión de cuentas y formación del presupuesto junto a Rodulfo Requena. Igualmente perteneció a la comisión de salubridad pública e higiene junto al Dr. José María Zamora. Años más adelante se encuentra nuevamente sirviéndole a los vecinos de San Casimiro. En la sesión ordinaria del Concejo Municipal de fecha de 19 de Enero del 1906 presidida por el Sr. Ramón Dupré se nombró la junta de sanidad de este municipio capital donde resultaron electos el venerable Sr. Cura Cándido María Machado, Dr. Vicente De Milita, el Dr. Manuel Mele , Mariano Carrera y el presidente del Concejo Sr. Ramón Dupré.

El Dr. Vicente De Milita fue un gran médico venido de Italia que le prestó un enorme servicios al pueblo de San Casimiro cuando éste se encaminaba al siglo XX como también a la población de San Sebastián de los Reyes. Así mismo le gustaba el deporte de los gallos pero no se sabe la razón que lo llevó a poner en venta su gallera. “En la sesión extraordinaria del 30 de abril de 1909, Miguel Zamora Bolívar manifestó haber sido autorizado por el ciudadano Dr. Vicente De Milita para proponer al Concejo la venta del establecimiento de gallera que posee en esta ciudad en la calle Monagas”.

En otra crónica daremos a conocer donde estuvo la gallera del Dr. Vicente De Milita, abundaremos en la vida de este hijo adoptivo de San Casimiro y de algunos jueces de gallera que eran funcionarios pagados por el concejo municipal de San Casimiro.

CRÓNICAS DE UN SANCASIMIREÑO


Salvador Rodríguez